El programa ‘Quédate en México‘, en vigor desde el 20 de enero de 2019 bajo la política migratoria de “tolerancia cero” del gobierno de Trump, ha provocado la deportación en ausencia de la mitad de los solicitantes de asilo forzados a esperar por sus procesos judiciales en el país vecino.

De acuerdo a un informe de diciembre del Centro de Información y Acceso de Registros Transnacionales (TRAC) de la neoyorquina Universidad de Syracuse, los Protocolos de Protección al Migrante (MPP) han permitido a EEUU enviar a México a 56,000 inmigrantes que buscaban asilo en el país del llamado “sueño americano”.

Sin embargo, TRAC estima que “un sorprendente 50 por ciento [de los que recibieron una notificación para comparecer ante un tribunal migratorio (NTA)] no se presentó debido a los muchos desafíos” a los que se enfrentan antes de llegar a la audiencia.

El mismo estudio indica que, en proporción, hay un ligero mayor número de personas que esperan en México su primera audiencia que las que lo hacen en Estados Unidos. Sin embargo, la citación de quienes tienen permiso para esperar en el mismo país en el que piden la protección se suele demorar más tiempo. El centro universitario considera que esto se explica por la batalla para “mantenerse al día” que han librado las cortes encargadas de los casos de MPP.

La ventaja de quienes se quedan en EEUU es que tienen más posibilidades de encontrar representación legal. El informe de TRAC apunta que entre enero y noviembre del año pasado “solo un cuatro por ciento de los inmigrantes” acogidos al programa ‘Quédate en México’ consiguieron abogados frente al 32% de quienes pudieron permanecer en el país.

Por otro lado, 9 de cada 10 solicitantes de asilo presentes en EEUU han asistido hasta el momento a todas las comparecencias en las cortes migratorias que llevan sus casos. Un amplio contraste con ese 50% forzado a esperar en México y deportados finalmente por no personarse ante el tribunal en el momento de la cita.

El Diario