Una mujer de Florida que alimentó buitres, cocodrilos y otros animales salvajes desde su casa en una comunidad cercada acordó pagar 53,000 dólares en una demanda que presentó la asociación de propietarios de vivienda.
El juez del condado Palm Beach, Scott Kerner, ordenó a Irma Acosta Arya que desista de alimentar permanentemente a animales salvajes y pague la multa a más tardar el 14 de febrero, reportó el medio Palm Beach Post.
Los vecinos y la asociación de propietarios de vivienda señalaron que la costumbre nocturna y diurna de Acosta Arya de dar de comer a los animales atraía a bandadas de buitres que defecaban y vomitaban, además de mapaches, cocodrilos y linces. La comunidad con campo de golf colinda con la reserva Grassy Waters que es hábitat de varios animales salvajes.
“Si esto fuera el fin y se pudiera garantizar, estaría muy contento”, dijo el presidente de la asociación Gordon Holness después de la audiencia del miércoles. “Ésta es una mujer con una compulsión. Con suerte, comprende la extrema penalidad a la que sería sujeta si vuelve a incurrir. Después de un tiempo te vuelves cínico”.
Acosta Arya no asistió la audiencia, pero su esposo e hijo sí. Su abogado, James Potts Sr., le dijo al juez que ya no volverá a alimentar a los animales cerca de su casa.
Los buitres que llegaban para ser alimentados después merodeaban en el lugar y destrozaban las zonas de piscinas, destruían muebles de patio y asadores, y saturaban el lugar con sus desechos.
El Nuevo Diario