El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, exhortó este martes a los legisladores a reformar la Ley de Movilidad Humana para «expulsar y deportar» a los extranjeros que «son encontrados cometiendo delitos».
«Los extranjeros que vienen a disfrutar las maravillas de este país siempre son bienvenidos, los hermanos del mundo siempre son bienvenidos, los delincuentes, no. Aquellos que vienen a dañar nuestra sociedad, a asesinar, a delinquir, a hacer crimen organizado, no», declaró Moreno durante la firma de convenios para la seguridad ciudadana con 53 municipios del país.
El mandatario ecuatoriano también le pidió a la Asamblea que apruebe el Código de Seguridad que reposa, desde hace dos años, en la Comisión de Soberanía, Seguridad y Relaciones Exteriores.
«Con el nuevo texto se mejorara la defensa, la seguridad ciudadana y la inteligencia, puntos clave para poder combatir de manera decidida la delincuencia», agregó Moreno, acompañado por la ministra de Gobierno, María Paula Romo.
El pasado lunes, el comandante de la Policía, general Patricio Carrillo, habló en Ecuadoradio de las supuestas «amenazas nuevas», por el «flujo inusual de ciudadanos» que viajan a ese país «en condiciones negativas».
«Creo que hay que revisar mucho la Ley de Movilidad. También nos ponen en vulnerabilidad marcos legales que no permiten que ni siquiera la Policía tenga una legítima defensa ante un riesgo inminente», agregó.
Endurecimiento de la política migratoria
En la Constitución de 2008, impulsada por el exmandatario Rafael Correa, Ecuador aprobó el principio de ciudadanía universal, lo que permite el libre acceso de cualquier ciudadano del mundo hasta por 90 días, sin ningún requisito.
No obstante, el Gobierno de Lenín Moreno ha ampliado las restricciones. En agosto de 2019, el mandatario impuso el requisito de visa a nacionales de 23 países, especialmente africanos y asiáticos. A la par, se les exigió únicamente a los venezolanos una visa de turista, por 90 días, o una «temporal de excepción por razones humanitarias», que solamente es otorgada en los consulados ecuatorianos en Caracas, Bogotá y Lima, y cuyo formulario tiene un costo de 50 dólares.
Las medidas de endurecimiento han tenido lugar en medio de una situación excepcional por la llegada de oleadas de migrantes, en su mayoría de nacionalidad venezolana, debido a la compleja situación que vive la nación caribeña. El arribo, además, no ha estado exento de polémica.
La xenofobia contra los venezolanos alcanzó un pico durante el 2019. A inicio de ese año, turbas de ecuatorianos ingresaron a varias residencias en Ibarra para desalojar a inmigrantes venezolanos a golpes, tras quemar todas sus pertenencias, luego de que Moreno responsabilizara a la comunidad de la inseguridad en su país.
En aquella oportunidad, la Cancillería de Venezuela le pidió al gobierno ecuatoriano cesar «la instigación xenófoba que prefigura delito y lesiona los derechos humanos» de los venezolanos.
¿Qué establece la Ley de Movilidad Humana?
La Ley de Movilidad Humana, vigente en el Ecuador desde el 2017, establece que se deben cumplir con cinco pasos antes de deportar a un extranjero que, por ejemplo, haya cometido un delito, por lo que el proceso suele demorarse entre seis y ocho meses.
En esa normativa también se detalla que la deportación aplicará solamente cuando la persona haya incurrido en un ilícito inferior a los cinco años de cárcel. En caso contrario, deberá cumplir la condena en el país.
RT